Eurovisión, o un espectáculo donde lo que menos importa es la música
Manel Navarro ha resultado ser el artista elegido para representar a España en el próximo Festival de Eurovisión que se celebrará en Kiev (Ucrania). Aunque su elección no ha estado exenta de polémica. El artista catalán ha sido la tercera opción entre el público votante, no así entre el jurado, quien le ha otorgado la máxima puntuación y tras un empate a puntos con Mirela, el sistema mixto donde el voto del jurado tenía más peso (al contrario que en los años anteriores) ha resultado ser decisivo. La elección generó una gran polémica en el plató, donde se vieron momentos muy tensos y continuos enfrentamientos entre los fans de Manel y de Mirela.
#ObjetivoEurovisión fue lo más comentado del sábado por la noche y no precisamente por las actuaciones musicales. Los seguidores de Mirela y de Leklein se encendieron ante lo que ellos consideraban una injusticia y acabaron silbando, gritando y abucheando al ganador, ante las sospechas de tongo que rondaban por las redes. Un espectáculo bochornoso que acabó con Manel dedicando un irrespetuoso corte de mangas a todos los asistentes. Si esta es la imagen y el ejemplo de artista que queremos llevar a Europa tenemos que replantearnos muchas cosas, y quizás TVE debería de tomar medidas como las que en su día tuvo con la descalificación de John Cobra en la pre-selección de Eurovisión 2010.
La gala, emitida por TVE, estuvo presentada por Jaime Cantizano (al que pese a su experiencia la noche acabó superándole) con la colaboración de Irene Mahía y Paloma G. Quirós. Manel Navarro, Leklein, Paula Rojo, Mirela Cabero, Maika y Mario Jefferson competían por el único pasaporte a Kiev. Todos ellos habían sido elegidos internamente menos Leklein, quien ganó la fase previa. Tras el bloque de actuaciones en el que cada uno de los artistas defendió con mayor o menor suerte su canción, se abrió el sistema de votaciones y con él, comenzó la polémica.
El jurado estaba compuesto por tres rostros conocidos de la radio española, pertenecientes a las emisoras más «comerciales» de nuestro país: Virginia Díaz de Radio 3, Javier Cárdenas de Europa FM y Xavi Martínez de Los 40. Resulta curioso cuanto menos, que para la primera criba, la de la fase online, TVE contara con un jurado compuesto por profesionales de distintos ámbitos del mundo de la música: Productores, autores, músicos, cantantes, compositores, directores de orquesta, profesoras de técnica vocal y el director de alguno de los medios de comunicación más influyentes, como JNSP. Sin embargo, la decisión final la dejó en manos de tres locutores de radio, donde el que más y el que menos tiene afinidad con alguno de los artistas involucrados.
Las votaciones del jurado fueron ante todo polémicas. Hacía hincapié Xavi Martínez, el primero en dar su valoración, que la gala era una publicidad gratuita para los artistas y que para su criterio había valorado la voz en directo, la energía, el carisma y la pronunciación en inglés. Todo pensando en una marca personal. Así, sus votos iban para: Mirela (5), Maika (6), LeKlein (7), Paula Rojo (8), Mario Jefferson (10) y Manel Navarro (12). Por este último se decantó al ser el artista que más reproducciones tiene en streaming y por «ser el producto que puede envenenar del todo a Eurovisión». Una votación sorprendente, teniendo en cuenta que minutos antes había comentado que Maika y Paula Rojo eran las dos propuestas que iban a dar una espectáculo distinto. Al parecer al locutor de Los 40 le importan más las reproducciones que la calidad del artista y de su propuesta final.
Javier Cárdenas no coincidió con su compañero y sus votos fueron: Mario Jefferson (5), Paula Rojo (6), LeKlein (7), Maika (8), Manel Navarro (10) y Mirela (12). El colaborador de TVE sintió admiración por Leklein (a la que no obstante votó con el cuarto puesto) y comentó que esta semana comenzará a sonar su canción en su programa de Europa FM, «Levántate Cárdenas«. Al locutor no le ha debido de parecer suficiente pasar cada fase del Eurocasting como favorita, ganar la fase previa, y estar en boca de los seguidores del concurso desde noviembre, para que ya hubiera sonado «Ouch!» en su emisora.
El «peso» de desempatar a los dos candidatos recayó en Virginia Díaz, subdirectora de Los Conciertos de Radio 3. Su decisión estaba clara desde el principio pues, tal y como indicó, el pop latino de Mirela le «queda muy lejos». La propuesta de Leklein, cuya candidatura valoró al principio, le pareció no obstante muy arriesgada mientras que la de Manel Navarro era «muy actual, cálida, acogedora» y con una puesta en escena «muy serena, sencilla y sobria». Un criterio en el que apostó por la fórmula del «menos es más» y que resulta cuanto menos «curioso», teniendo en cuenta que justo antes, a Leklein la había descartado porque su puesta en escena era demasiado simple. Tras dar sus votos: Mirela (5), Maika (6), Paula Rojo (7), LeKlein (8), Mario Jefferson (10), Manel Navarro (12), explicaba que su decisión fue en todo momento coherente con sus propios gustos musicales. Una vez más, lo personal se anteponía a elegir la canción más adecuada para el festival.
En el momento del desempate era evidente la tensión. El público comenzó a gritar al unísono «Mirela a Eurovisión» temiendo que el jurado mantuviera sus votaciones y se decantara por el artista catalán, que en ese momento lo estaba pasando mal al verse abucheado y poco querido por el público. Y así fue, los tres mantuvieron sus votos e hicieron a Manel nuestro representante de Eurovisión 2017. Significativas fueron las palabras de Cárdenas refiriéndose al momento que estaba atravesando el de Sabadell: «un poco de respeto que un artista lo está pasando mal en el escenario«, dijo. Tal vez, debería pensar en los 392 artistas que fueron descartados en la fase previa, los que estaban viendo el bochornoso espectáculo desde sus casas y los 4 menos votados en la final que estaban ajenos a todo, viendo la tomadura de pelo y la falta de respeto y profesionalidad a la Música que sufrieron.
¿Era necesario realizar una gala para elegir a un representante que estaba ya decidido de antemano?. RTVE afirma que este sistema de elección ayuda a los artistas emergentes a tener la posibilidad de acudir al festival. La realidad es que solo sirve para financiar sus arcas a base de llamadas de teléfono para enviar votos «inútiles». Y es que, en muchos de los casos, no hay más que acudir a las redes sociales para ver que el resultado final, en vez de ayudar «ha frustrado» las ilusiones de todos esos artistas. Recordemos que muchos de ellos llegaban con un sueño y grabaciones de canciones y videoclips auto-financiados por ellos mismos, con todo lo que eso cuesta.
Una industria interesada por los medios y las grandes discográficas que tiene un daño colateral en este caso. Manel, el joven de Sabadell lleva años buscando un hueco en el panorama musical español y esta era una gran oportunidad para afianzar su carrera y darse a conocer en el mundo entero. No obstante, «Do It For Your Lover«, fue interpretado con una pobre puesta en escena y una voz nerviosa y temblorosa. El jurado inexplicablemente eso es lo que más destacó de su actuación. Y lo que a priori podría ser el lanzamiento de una carrera exitosa puede significar el fin de ella. Todo por unos intereses partidistas que han puesto en contra a millones de espectadores del cantautor.
¿Qué pasará si España vuelve a acabar el último del certamen?, porque siendo realistas este año hay más posibilidades que nunca de que eso vuelva a pasar. Seguro que en lugar de poner solución a un problema de raíz, que viene de muy arriba, más de uno de los organizadores y de los eurofans vuelve al recurrente tópico: «Nunca ganaremos el concurso porque siempre se votan entre países vecinos». Al menos ellos escuchan a los votantes del país de al lado, nosotros ni siquiera a los nuestros.