Salen a la luz 21 grabaciones inéditas de Paco y Pepe de Lucía
El pasado 25 de febrero se cumplió una década del fallecimiento de Paco de Lucía. Su corazón se paró a los 66 años de edad y con él dejaron de sonar también las melodías de uno de los máximos exponentes del flamenco. Desde entonces la guitarra flamenca llora su pérdida y le recuerda con profunda nostalgia. Sin embargo, el alma intrépida y creativa del músico gaditano continúa palpitando. Y lo hace, a través de una obra atemporal que ha calado en el acervo colectivo de la cultura popular.
Para conmemorar esta fecha tan especial BMG lanzará junto a la Fundación Paco de Lucía un disco inédito de canciones suyas. Se trata de 21 piezas que grabó junto a su hermano antes de que se dieran a conocer como Paco y Pepe de Lucía. El disco llevará por título «Pepito y Paquito» y se lanzará en el mes de mayo. A partir de ese día, a través de la compra del álbum, podrás entrar en el sorteo de una noche en el hotel de Paco de Lucia, Hotel Boutique Entre Dos Aguas.
«Bulería Niño Ricardo» y «Me falta la Resistencia» son los dos primeros adelantos, que nos trasladarán a la génesis de dos figuras esenciales del flamenco contemporáneo. Las piezas preceden a los que fueron sus primeros trabajos oficiales rubricados como el dúo Los Chiquitos de Algeciras, cuando tenían 13 y 11 años. Fueron grabados de manera rudimentaria con un magnetofón de la época y suponen dos documentos fonográficos que encierran un valor histórico incalculable.
La primera de ellas «Bulería Niño Ricardo«, es un solo de guitarra en el que la esencia y la técnica depurada de Paco de Lucía evidencia el talento que ya tenía. Una composición que no oculta su inspiración en Niño Ricardo. La huella de quien fuera uno de los precursores del flamenco queda patente. Pero también se adivina el germen de una personalidad musical diferente que está en plena formación. Espejo y reflejo del alumno que años después superará al maestro.
La voz de Pepe de Lucía irrumpe con nervio y carisma en «Me Falta La Resistencia«. En ella adapta un célebre tango de La Repompa de Málaga. Se trata de un cante jondo lleno de desgarro y pasión que cristaliza en el diálogo natural que se produce entre su capacidad vocal y la habilidad técnica de su hermano. El pulso que ambos le toman a este palo es un buen preludio de su legado. Es la herencia de dos músicos que marcaron una época de expansión del flamenco a todo tipo de latitudes.