Marwan, el arte de combinar la música y la poesía
Marwan no se denomina a si mismo poeta. Escribe poemas pero es cantautor. Ahí ha desarrollado toda su carrera desde hace 10 años. Pero ha llegado un momento en el que las canciones se le han empezado a quedar cortas. Por ello, en su último trabajo ha optado por el formato de disco-libro.
Es la primera vez que junta canciones y poemas en un mismo espacio. 14 nuevos temas y un poema de 80 páginas para entender de qué va eso de madurar. “Las canciones llegan hasta un punto. Una canción tiene una duración determinada, una longitud de letra, tienes que poner rimas, lo tienes que ajustar a un ritmo… eso te limita”, explica, “en los poemas me siento infinitamente más libre”.
Marwan tenía quince años cuando consiguió su primera guitarra. En su casa se escuchaban los discos de Joan Manuel Serrat, Silvio Rodríguez y Joaquín Sabina, algo que le influyó pese a que en el grupo de amigos gustaba más el rock duro. Pero el más importante, el que fue un “detonante”, fue Ismael Serrano. Sus canciones le tocaron su fibra más sensible y comenzó a escribir y componer. Un cajón de sastre donde cabe de todo pero, especialmente, los sentimientos.
En las filas de la denominada “música de autor”, el cantante se declara muy satisfecho con el público que reúne en salas en todo el país, prescindiendo de los sistemas de promoción convencionales, usados por las grandes compañías. El artista madrileño de origen palestino ha llegado a realizar una gran cantidad de giras internacionales que incluyen a varios países de América Latina, como Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú, República Dominicana o Uruguay.
En sus conciertos teje poesía con música. Cuando lo escuchas, te asombra con su sensibilidad y te aplasta con un aluvión de sentimientos. Entonces, quizá, no puedes evitar identificarte con los temas y situaciones que toca. Él desnuda su alma para que tú desnudes la tuya. Y entonces te sientes más frágil que una pompa de jabón. Su prestigio como poeta y cantante ha crecido tanto que en uno de sus conciertos en Madrid (Teatro Circo Price) le acompañaron Pedro Guerra, Jorge Drexler e Ismael Serrano y ha llegado a compartir cartel con cantantes de la talla de Ana Belén, Víctor Manuel y Fito Páez.
Esta faceta de cantautor no ha eclipsado, sin embargo, su aura de poeta. Es más, la ha multiplicado. Su primer poemario, “La triste historia de tu cuerpo sobre el mío“, ha sido un auténtico éxito. El libro habla de territorios afectivos y territorios sociales, del deseo de mejorar y del deseo carnal, de la dificultad de tener verdad y comprensión entr
Hay espacio para poemas en los que no se sabe si es invierno o verano, pero se siente lo desapacible. Otros que nos hacen ver que el destino son siempre nuestras ganas. Muchos que nos harán reconocernos, entre avergonzados y agradecidos. Perdonados. Son poemas que al hablar de un hombre hablan de todos, porque este hombre tiene la capacidad de serlos todos, tal es su empatía.
Su nuevo libro, “Todos mis futuros son contigo” tiene unas semanas en las librerías y ya está en las listas de los más vendidos. En dicha obra hay más de un centenar de poemas que persiguen la justicia social con la misma determinación con que ciertos gobernantes aplastan a los pueblos. Hay caídas, hay desvelos, homenajes, viajes al interior, hombres que no consiguen dar consigo y hombres que se escriben a sí mismos las cartas de amor que siempre se negaron.
Marwan es una persona cercana, con ideas claras y sabe que ha tocado el alma de muchas personas. Lo que le emociona es lo que le inspira. Y esa inspiración le lleva a transitar por los diferentes caminos de la creación. Por el momento, lleva cinco discos y un libro de poemas, sin contar el nuevo, que le han dado ya “mil alegrías”, y las que aún quedan por venir, seguro.