Manu Chao, vuelve el icono de la protesta social mundial
Manu Chao nació hace medio siglo en París. Es hijo de padres españoles que emigraron a Francia durante la dictadura de Franco. Su biografía es el sueño de ese adolescente que quiere recorrer el mundo con una guitarra acústica como único equipaje. Cruzar fronteras para tocar canciones con amigos. Ofrecer conciertos en los mejores estadios del mundo… y también en las calles de los barrios marginales. Músico nómada, trovador con conciencia social. Una vida en definitiva que, unida a su carácter multicultural, se ha convertido en una especie de viaje alrededor del mundo.
Chao es una de las figuras más representativas de la música alternativa, con una marcada militancia política, sobre todo a favor de los desfavorecidos y contra las malas prácticas de los gobiernos e instituciones de poder. A pesar de no haber estado activo creativamente en la última década es uno de los artistas más prolíficos del panorama musical nacional. Su último álbum data de 2007, «La Radiolina«, la pequeña radio» en italiano, refiriéndose a una radio de transistores de tamaño pequeño. Un trabajo marca de la casa que estaba cantado en español, inglés, francés y portugués brasileño.
Ahora, tras 10 años sin publicar ningún material, Manu Chao ha vuelto dispuesto a recuperar el tiempo perdido. El cantautor ha lanzado este 2017 tres proyectos en paralelo. Por un lado, ha editado varias canciones nuevas. Entre ellas, «Words of Truth«, «A la par del amor«, «La vecina del Patio» o «No solo en China hay futuro«, dedicada al bar «Iris» de Barcelona. Las nuevas composiciones llevan toda la esencia del mejor Manu Chao, conocido por sus ideas políticas vinculadas al anarquismo. Las letras, cargadas de crítica social, reflejan muchos de los ideales que le han llevado a ser considerado un icono de la protesta mundial: el amor, la vida en los guetos o la inmigración.
Por otro lado, ha presentado un nuevo proyecto denominado TI.PO.TA, que comparte junto a la actriz y cantante griega Klelia Renesi. El dúo se estrenó con tres lanzamientos antes del verano: «Athina Vrazi«, «Peki Peki Song» y «Moonlight Avenue«. Todos los temas están editados bajo su propio sello, Radio Bemba, y grabados de casa en casa, con su estudio de mochila por todo el mundo y durante sus largos viajes. El mejor ejemplo es el último single, «Do you hear me calling«, que tiene un mensaje muy claro: «En los últimos tres años cientos de miles de refugiados han cruzado el mediterráneo en busca de un sitio seguro como resultado de la guerra en Siria y en muchos otros lugares del planeta. Algunos lo han conseguido, otros no. Nuestra canción y mensaje es claro como las aguas y las tragedias que esas almas han cruzado«, nos cuentan.
Por último, el músico de origen francés acaba de poner música al documental Seeds of Freedom. La cinta trata los beneficios terapéuticos de las plantas medicinales y muestra la importancia de consumir agricultura ecológica. No faltan las voces críticas con las grandes multinacionales farmacéuticas y agro-alimentarias. «Es el momento de ser solidarios y generosos para ayudar a toda esa gente a reconectar con los principios de la vida: la comida, el hogar, la seguridad, la educación y la dignidad«, explica el cantante, que ha compuesto un tema a favor de las semillas libres y en contra de la agricultura destructiva de las grandes multinacionales, que acaba con los sistemas campesinos y viola sus derechos a las semillas, la tierra y los recursos naturales.
Manu Chau ha vuelto, y aún le queda cuerda para rato.