David Otero lanza el vídeo de “12 horas”, grabado en directo
Un viaje extraordinario es el que está viviendo David Otero. Un camino transitado con los pies descalzos para sentir siempre la textura del momento y con las manos abiertas para cazar al vuelo los mejores recuerdos. Y si miramos al reflejo de sus ojos veremos las sonrisas de toda esa gente que ha querido formar parte de este viaje. Porqué sus sonrisas son la de David. Y a todos ellos, Otero les dedicaba su tema «12 Horas» el pasado 29 de septiembre, durante el concierto que el artista madrileño celebró en la sala La Riviera. «Va para todo el público que me apoya, que me sigue en redes sociales y que habéis comprado vuestra entrada hasta llenar la sala”, explicaba.
En su hábitat natural, los escenarios, más de cincuenta directos este año avalan a un músico que sin duda alguna se ha establecido como uno de los referentes del pop español. En la capital se colgó el cartel de «no hay entradas» en sus dos conciertos, y a esta ciudad le siguieron otras como Valencia, Alicante o Albacete. Memorables fueron también los viajes al otro lado del Atlántico, con shows en México, Argentina y Chile. Cada uno de estos lugares con particularidades que los hace especiales, y a su vez conectados por elemento común, el buen rollo a raudales.
Y es que, con su último álbum de título homónimo, “David Otero” ha ido más allá y ha sacado a relucir su talento compositivo como nunca, con canciones incisivas, cargadas de frescura y melodía, que nos trasladan inevitablemente a un vaivén de sensaciones. La energía del álbum es palpable. Otero se ha lanzado a la aventura sin red, con la valentía de quien cierra los ojos para volver a ser niño. Sin cadenas, ni candados. Con el pecho descubierto y el corazón en las manos. Con la madurez que da la experiencia y la energía del que quiere seguir aprendiendo sin parar.
David conecta con la realidad y lo hace con extrema naturalidad. Esto queda marcado a fuego lento en sus canciones, que con tanto mimo fueron compuestas y que celebran algo tan sencillo como vital, la positividad. Y las canciones, que quedan para todos, se fundieron con la gente. Con el éxito «Una Vez Más«, supimos que bailar a saltos era la única salida. Con «Aire«, inspiramos la brisa cálida de las emociones. Con «Loco de Amor«, bebimos de la eterna juventud de los enamorados. Rodeado de amigos y con la diversión en su bandera, David Otero se ha lanzado a vivir con la sonrisa puesta.