Guillermo Salas, «No soy gran fan de las autoetiquetas»

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Guillermo Salas, «No soy gran fan de las autoetiquetas»

Guillermo Salas fusiona en la música y el balonmano sus dos grandes pasiones. Su tercer disco, «Los Más Bonitos de España«, es un álbum ecléctico que narra su historia, desde que empezó con su primera banda, Electrokill, hasta el día de hoy. Rico en matices, el disco bebe de influencias muy diversas, desde bandas internacionales como Eminem o Metallica hasta grupos nacionales como Love of Lesbian o Kase.O. En esta entrevista nos cuenta más detalles acerca de este nuevo trabajo.

 Para quién no haya oído hablar de ti, ¿Quién es Guillermo Salas?, ¿Cómo te presentarías a nuestros lectores?

– Soy un tipo que juega a ser músico por necesidad y por gusto. Y le pongo mucho empeño porque, no solo me encanta este juego, sino que es la única forma que conozco de contar las cosas que no sé decir. Antes siempre me definía con una frase que utilizó una vez un amigo para meterse conmigo: “afamado músico low profile”. Solo era una tontería para dotar de cierta entidad a mi intrascendencia pública, pero la realidad es que hay cierta profundidad y cierta pretensión en el concepto.

– Acabas de lanzar tu nuevo disco “Los más bonitos de España”, ¿Qué es lo que nos vamos a encontrar dentro de él?

– Doce temas que cuentan una historia y que piden a gritos ser escuchados. Doce temas de los que, por cierto, estoy profundamente orgulloso. A mi gente siempre le digo que, por primera vez, sé sin atisbo de duda que me encanta lo que he hecho. Nunca he sido mi mayor fan, así que realmente me parece una buena carta de recomendación. Te aseguro que no ha sido fácil conseguirla 😅

– Una de las cosas que más nos sorprende es la gran variedad de estilos que hay en el disco, ya que fusiona influencias de música indie, pop, hip-hop, rock… Si tuvieras que etiquetarte tú en un único género, ¿Cuál dirías que es con el que te sientes más identificado?

– Mira, voy a “hacer un Juanes” y a decirte que vengo del heavy 😂 Crecí aprendiendo a tocar Metallica con la guitarra española de mi madre y mi coherencia estilística no ha mejorado mucho desde entonces, supongo que solo se ha expandido. No soy un gran fan de las autoetiquetas, en cualquier caso. Creo que es bonito poder vagar entre influencias muy diferentes y que, además, cada forma sirve a un propósito. Lo cual, por otra parte, es muy útil cuando se trata de contar una historia que no es lineal ni plana.

–  ¿Y si tuvieras que definir el álbum en una sola frase, cuál sería?

– «Los Más Bonitos de España» es sueños, es sudor, es lágrimas, y es una pequeña parte de mi historia que, en realidad, podría ser la de cualquiera.

– El disco desarrolla una historia a través de 12 canciones. ¿Podríamos decir que es un trabajo conceptual y en cierto modo autobiográfico?

– Sí, así es, aunque tampoco era la intención al inicio del proyecto. Sin embargo, cuando estaba buscando una historia que contar, por suerte al principio y por desgracia al final, mi propia vida me la puso delante. Y a río revuelto, ganancia de cantantes, supongo. En cualquier caso, como en prácticamente cualquier trabajo de este tipo: ni todo lo que se cuenta pasó, ni todo lo que pasó se cuenta.

– Dos de las canciones de esté disco, “Muralla” y “Una Historia Más” fueron publicadas en el año 2021. Sin embargo, el álbum completo no ha salido hasta dos años después. ¿Por qué ese parón?, ¿Qué ha pasado en todo este tiempo?

– Sí, el proceso se alargó bastante en el tiempo. La idea era que esos primeros singles fuesen una base de la que partir: puntos de una historia que unir musical y narrativamente posteriormente con otros temas, hasta tener un nuevo disco. Poco a poco me di cuenta de que el reto me venía grande y estaba muy lejos de poder hacer algo así. Así que seguí estudiando música, pero abandoné el proyecto tal y como estaba planteado más pronto que tarde.

Dejé de tocar desde entonces hasta julio del verano pasado, con las ideas más claras y ganas renovadas. Ahí volví a encontrarme con las canciones, a hacer ejercicios compositivos y a sacar las primeras ideas de lo que ha acabado siendo el disco. Al final, la historia de «Los Más Bonitos de España» se acabó juntando y, como quise desde el principio, también se unió narrativa y musicalmente a dos de aquellos primeros singles. 

– Además de esas dos canciones editaste otros dos singles que se han quedado fuera del disco, “Frágil” y “El Último Grito”, ¿Cuál ha sido el motivo?

– No terminaban de funcionar bien con el conjunto. Tanto a nivel de sonido como de lo que cuentan, se alejaban bastante más de la línea y la narrativa que Adri Hidalgo, productor del disco, y yo queríamos seguir. No fueron tampoco los únicos descartes: hay más material que quedó fuera porque sentíamos algo parecido y quizás podamos volver sobre él en otro proyecto o más adelante.

– Nosotros te conocimos gracias a la canción “Equinoccio”, que casualmente es la que se encuentra justo en la mitad del álbum. ¿Cuál es la historia que lleva detrás?, ¿Es este el eje central del disco?

– Equinoccio es el momento en el que todo cambia. Empieza mencionando un mensaje de audio que haría un poco las veces de mcguffin para la historia, y transcurre por ese momento en el que sabes que, aunque todo aún está bien, está a punto de derrumbarse y no puedes hacer nada por evitarlo. «Segundo Asalto», de Love of Lesbian, es sin duda la gran inspiración de Equinoccio.

– Tu mapa de escuchas en Spotify te sitúa en países como México, Colombia, Chile… ¿Te imaginabas tener tanta repercusión fuera de nuestras fronteras?

– En general el disco ha ido funcionando bien para lo que son las cifras en las que nos movemos, lo cual es una bendita y maravillosa sorpresa. Que haya repercusión en países como los que mencionas o en Argentina, donde también se está escuchando bastante, es genial, pero solo es la consecuencia natural de un mercado digital y global en el que el consumo no está limitado por las fronteras. He tenido la suerte, además, de poder hablar con varios medios y curadores de contenido de estos países y les agradezco la oportunidad de abrirme las puertas a sus públicos.

Muchos artistas nos dicen que en esos países de Latinoamérica se valora mucho más la música y a los artistas en general. ¿Cómo ves tú el panorama musical?, ¿Consideras que en España se dan suficientes oportunidades a los artistas emergentes que estáis empezando?

– Hay una cantidad de talentazo tremenda. Solo dentro del mismo paraguas estilístico ves a tanta gente con propuestas diferentes, novedosas, arriesgadas… es muy complicado que haya un mercado real, laboralmente sostenible, para todos. Suficientes oportunidades no va a haber nunca, y las condiciones en las que se mueven, o nos movemos, la mayoría de artistas emergentes son más bien crudas. La realidad es que nos apoyamos, disfrutamos del camino y, si llega la suerte, cruzamos los dedos para que nos pille tocando y que todo funcione.

– El otro día fue la noche de las Perseidas, que es el título de la canción con la que se cierra el disco. ¿Si pudieras pedir ahora mismo un deseo cuál sería?

– Poder seguir creciendo como músico y no perder nunca las ganas, la ilusión y la necesidad de compartir historias mediante la música.

– Además de la música tu otra pasión es el balonmano. De estas dos opciones, cuál preferirías: ¿Componer el himno de la selección española para el próximo mundial de balonmano o poder formar parte de los convocados?

– Si me hubieses pillado hace unos cuantos años te habría dicho la segunda opción con los ojos cerrados, pero a estas alturas creo que me tendré que conformar con seguir disfrutando de sus éxitos. Tampoco me veo componiendo un himno, la verdad… ha sido una coña recurrente en casi todos los clubes por los que he pasado, pero me parece complicadísimo hacer un papel digno con algo así. Otra cosa sería hacer un arreglo a algo ya existente, con eso igual sí me animaría.

–  Y ya que estamos soñando… Si tuvieras que elegir un artista, nacional o internacional, para realizar un dueto. ¿Quién sería?

– ¡Soy incapaz de decirte uno solo! Además, tendría que ver qué rollo lleva el tema. Si fuese más rockero, me encantaría poder hacer algo con los Kitai; si fuese más rapero, me quedaría con Rayden; pero claro, si nos dejamos llevar y nos metemos en el terreno de los artistas míticos, hay un montón: crecí con Estopa, me fascina Love of Lesbian, Kase.O y SFDK me inspiran un montón…

– Para terminar, queremos mirar hacia el futuro. ¿Qué otros proyectos tienes previstos a corto/medio plazo?, ¿algún otro single o conciertos a la vista?

– Tengo que retomar la gira, pero con el calendario de balonmano es complicado. Estoy tratando de buscar fechas en las que sea viable viajar a tocar un viernes y jugar el sábado en la misma ciudad, o al menos cerca. De momento he tenido que aplazar lo que había fijado. Por ejemplo, tenía Santander el 14 de septiembre y al día siguiente juego en Algeciras, era muy poco viable. Espero poder dar novedades pronto sobre este tema, porque aún quedan algunas salas en el tintero y, aunque a veces vamos a pelear en el barro delante de 5 personas, disfruto mucho de los directos.

– La última pregunta la dejamos siempre abierta para los artistas. ¿Algo que se te haya quedado pendiente de decir o que quieras añadir?

– Nada, simplemente darte las gracias por la entrevista, siempre es un placer poder hablar de todas estas cosas, y por supuesto dar las gracias a todos los que la hayan leído.

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