
El universo único y rompedor de Violeta Hódar
Mucha gente se pregunta porque de una remesa de artistas salidos de la misma edición de Operación Triunfo unos triunfan y otros no. La respuesta es sencilla: la autenticidad. Es decir, tener ese algo que te haga diferente. Violeta Hódar lo tiene. La granadina ha sabido encontrar ese sello de identidad único, con una estética rompedora y transgresora que la desmarca de cualquier otra propuesta similar. Y presentaciones como la que tuvo lugar este sábado en Madrid así lo demuestran.
El evento era exclusivo para fans, con unas directrices que garantizaban que no hubiera posibles filtraciones. Por ejemplo, no se hizo pública la ubicación hasta unas horas antes de la celebración. Y una vez allí todo seguía siendo un misterio. Nada más entrar, recibimos un tatuaje con el logo de Violeta, un flyer con las palabras «Madrid. Acto I» y una pegatina para tapar la cámara del móvil. Los fans con acceso VIP añadían a eso un pack extra que incluía un pañuelo limitado en color gris.
El edificio Larra, un espacio diáfano fue el lugar elegido por Violeta para presentarnos su nuevo trabajo. Allí todo estaba decorado y cuidado al milímetro, inspirado en la ópera de la Traviata. En la obra, la protagonista de nombre también Violetta, da una lujosa fiesta en el salón de su casa. La atmósfera del Larra nos teletransportaba a uno de los momentos cúlmenes, el brindis, con una mesa central decorada con copas alrededor de la cual Violeta interpretó algunas de sus nuevas canciones.
Dos de ellas ya han salido a la luz: «III. Ojalá» y «II. Contigo». La tercera fue un tema inédito del que no desveló el título. Para los más impacientes por conocer el resto de las canciones, éstas se podían escuchar en una tienda de campaña hecha con sábanas que disponía de auriculares. El escenario se completaba con una zona de maquillaje y otra de tatuajes. Durante la actuación, también se repartían tónicas afrutadas de sabores tan variados como floral, mediterráneo o spicy.
Más allá de lo estético, la madurez que ha adquirido Violeta en esta nueva etapa es más que evidente. El giro emocional que ha dado en las composiciones también. Si «III. Ojalá» abordaba el sentimiento de pérdida que surge cuando algo inevitable ocurre, la letra de «II. contigo” brota desde el amor más puro: ese que es capaz de renunciar por el bienestar de la persona amada. Son los dos primeros capítulos de una historia conceptual que plasma en canciones su renacimiento musical y personal.