Sara Ráez presenta su álbum debut “Antes de saber quién era”
Sara Ráez es una joven artista con una gran capacidad expresiva. Es poseedora de una voz limpia, brillante, vigorosa y rica en matices. Sus canciones transmiten una sensación positiva, que envuelve y enamora. Es canción en esencia, que trasciende lo andaluz, canción pop que se torna global, universal.
Nacida en Úbeda (Jaén), donde se respira el arte y el flamenco en cada esquina, desde muy pequeña empieza a cantar, componer y tocar la guitarra. Su primer destello de talento es “Antes de saber quién era“, su álbum debut. Un trabajo cálido que hace latir desde la primera nota. El disco representa muy bien su forma de componer. Melodías fantásticas, llenas de nostalgia, locura, amor y poesía.
La intérprete llama a la puerta del pop como una de las promesas musicales de este 2015. Y lo hace con un derroche de sentimientos pequeños, que se pegan a la piel y erizan. Con una incontinencia creativa sin fin, el álbum ofrece un recorrido por las emociones creando un efecto mántrico, casi hipnótico. El resultado, un conjunto de canciones intensas, vitales, directas y cargadas de energía e intimidad, envueltas por la fuerza que consigue transmitir con su voz y el arte andaluz que lleva dentro.
En definitiva, “Antes de saber quién era” es un disco para escuchar, para disfrutar pero, sobre todo, para sentir. Se trata de historias cotidianas, del día a día. Un paseo a compás pero sin reloj, en el que el espectador recorre sus paisajes llenos de contrastes y vive sugerentes aventuras a cada canción. El álbum ha sido grabado bajo la dirección de Jordi Cristau y con músicos de la talla de José Manuel Posada, David Bao y Luis Morate. Es una pieza producida con elegancia y naturalidad, que suena a éxito. Un trabajo sin prejuicios, ni demasiados artificios, con mimo y realzando la palabra, en la búsqueda de una sonoridad desnuda y valiente.
Sara Ráez destaca por esa sutil mezcla de flamenco y pop, pero también por el fuerte sentimiento que entrega en cada estrofa. Amoldado a una dulzura contagiosa, el increíble talento y creatividad de Sara se refleja en sus mágicas letras. Canciones que se viven, se perciben con una mirada al frente, con una sonrisa abierta. Letras cuidadas y cantadas con una voz cargada de giros que no deja indiferente, suave pero con una enorme personalidad. Una dualidad que es la que conforma el eje del disco y le da un sentido completo a su proyecto.
