Manel Espinosa, “Escribir canciones es algo terapéutico”
El maltrato psicológico es una lacra de la sociedad actual, especialmente el que sufren las mujeres por parte de los hombres. A veces no somos del todo conscientes pero puede llegar hasta el punto de vaciar a una persona, de hacerla sentir incapaz de valerse por sí misma. Acaba sintiendo que ella misma no tiene valor alguno y, además, es un tipo de maltrato difícil de detectar incluso para quien lo sufre.
Con “Eres Oro“, su último single, Manel Espinosa trata de arrojar algo de luz a tanta oscuridad haciendo saber a todas las víctimas precisamente eso, que son oro. En esta entrevista el artista nos cuenta más detalles de este nuevo trabajo. Además, nos adelanta algunos de los proyectos que tiene previstos para este año.
– Para los que no hayan oído hablar de ti, ¿Cómo te presentarías a nuestros lectores?
– Diría que soy un artista valenciano enamorado de la música y de contar historias. Alguien que intenta encarar la vida desde una perspectiva divertida y al que le llena sentir que su música ayuda a otras personas a pasar por momentos complicados.
– Acabas de estrenar tu nuevo single “Eres Oro”, una canción que trata un tema delicado como es el maltrato psicológico. ¿De dónde surge la inspiración para abordar este tema?
– Surge de la experiencia personal. Una amiga íntima pasó por una experiencia muy mala que yo viví bastante de cerca y me hizo reflexionar mucho. Por suerte, tras varios años sufriendo maltrato psicológico continuado consiguió ver la luz al final del túnel y finalmente salir.
– El título de la canción está escrito en singular, ¿va dirigido a alguna persona en particular?
– Aunque, como he dicho, la canción está inspirada en la experiencia de una persona en particular, ésta va dirigida a cualquier persona que esté padeciendo abuso psicológico, que muchas veces comporta un autoestima deteriorado. Me centro más en la figura de la mujer, porque son las que más lo sufren y además lo sufren en gran medida por el mero hecho de ser mujeres, pero eso tampoco quita que los hombres también lo padecen, o personas que se identifiquen de cualquier otra manera.
En definitiva, quiero que sepan que por ellas mismas pueden conseguir cualquier cosa, que tienen el mismo valor que cualquier otra persona, que son capaces y que son oro.
– El lanzamiento coincide con la semana en la que se celebra el día internacional de la mujer. Aunque el maltrato psicológico es una lacra que afecta tanto a hombres como mujeres, las estadísticas no engañan: Son más las mujeres afectadas por violencia doméstica que los hombres. ¿Qué podemos hacer como sociedad para erradicar o ayudar a combatir este problema?
– Bueno, lo cierto es que yo creo que no soy el más indicado para dar posibles soluciones a estos problemas, creo que eso lo tendrían que hacer expertas y expertos en la materia. Sobre este tema tengo también que comentar que si alguna persona que esté leyendo esta entrevista quiere informarse bien, en las próximas semanas estaré entrevistando y charlando con psicólogos expertos y lo publicaré a través de mis redes sociales.
Sí que puedo decir que, por mi parte, lo que debo hacer en primer lugar es observarme a mí mismo y tener una visión crítica para tratar de corregir mis comportamientos machistas. Luego, tratar de escuchar lo que consideren voces expertas y, como artista, sé que tengo el poder de dar cierta visibilidad y aportar mi granito de arena para mejorar la vida de algunas personas. Si con “Eres Oro” consigo que una sola mujer se sienta mejor yo ya estaría contento.
– El maltrato psicológico suele pasar más desapercibido que el maltrato físico, por ejemplo no acapara titulares en los medios de comunicación. Pero no por ello es menos grave. ¿Piensas que se le debería dar más visibilidad?
– Sí que considero que se le debería dar más visibilidad y sobre todo educar más a la sociedad en este aspecto. Precisamente porque es básicamente invisible ya que las heridas en la mente no se ven tan fácilmente. De hecho, las personas que lo sufren muchas veces son incapaces de darse cuenta ellas mismas y los que conocemos a alguien que lo padece tampoco sabemos cómo actuar.
– Dices que utilizas la música para cantar lo que no te atreves a contar. ¿Es una manera de romper la coraza y sacar tus sentimientos más profundos?
– Exactamente. Desde el principio la música me ha servido para expulsar o exteriorizar ciertos sentimientos y experiencias. Por alguna razón encima de un escenario o en el estudio siempre me he sentido muy bien y escribir canciones ha sido desde siempre algo terapéutico.
– En este sentido, ¿Cuál es la canción que más te ha costado escribir, ya sea desde el punto de vista emocional o por su carga sentimental?
– “Historias Bonitas” es la canción con más carga sentimental que he escrito, una canción en la que básicamente hablo de recuerdos de la infancia con mi abuela y de lo que me gustaría que estuviese todavía aquí. Cada vez que los pienso, como lo estoy haciendo ahora mismo, me duele mucho, pero me quiero quedar con lo bonito y la alegría de esos momentos que nunca olvidaré.
Hay otra canción que tengo pendiente desde hace años pero todavía no he encontrado el momento adecuado para escribirla.
– Apenas llevamos dos meses de año pero este no es tu primer lanzamiento en 2022. Hace poco publicaste un tema que lleva por título “Goodbye Hong-Kong”, ¿de donde nace esta otra canción?
– Esta canción es un “ritual de despedida”, que es un acto simbólico que puedes hacer para pasar página y seguir adelante después de una ruptura sentimental. Es una manera de decir adiós, cerrar el capítulo y seguir avanzando hacia el próximo destino. Pasé por una ruptura sentimental durante el inicio de la pandemia y tengo la suerte de tener una madre psicóloga que me recomendó una serie de lecturas que me llevaron a esto.
Un ritual de despedida puede ser cualquier cosa: quemar una prenda de ropa, romper una foto… cualquier cosa. Yo decidí hacer una canción y me fue muy bien.
– Han sido dos años muy difíciles para el mundo de la música a causa de la pandemia. En tu caso te pilló estudiando música en Dublín. ¿Cómo te afectó esta situación?
– En mi caso puso mi vida patas arriba y lanzó mis planes a la basura. Acabó por destruir a mi antigua banda, Bostok, y el trabajo que tenía como músico y videógrafo se esfumó por razones obvias. Mi experiencia estudiando música en Dublín obviamente se la cargó bastante. Sigo estudiando pero ya no es lo mismo, casi la mitad de mi carrera ha sido online o sin los eventos que antes había.
Pero bueno, por otra parte, esa situación me empujó a centrarme en mi proyecto personal y a empezarlo seriamente, por así decirlo. Probablemente sin la pandemia no estaría haciendo esta entrevista hoy.
– Sabemos que entre tus influencias se encuentra Rosalía, de quien hiciste una versión de su éxito “Pienso en tu mirá”. Pero, ¿de qué otros artistas beben tus canciones?
– Sí, Rosalía es una influencia importante para mí, no tanto en lo puramente musical, sino más bien en el manejo que tiene sobre su carrera. Se nota que ella lleva el volante y que tiene influencia en todos los apartados, desde la imagen y vestuario hasta el directo. Podríamos hacer una entrevista solamente de las influencias, pero a día de hoy mencionaría también a Residente, por su trabajo tanto en solitario como en Calle 13, y a Rayden.
– Revisando tu discografía vemos canciones interpretadas tanto en español como en inglés, ¿por qué esta heterogeneidad de idiomas?
– Porque me gusta, porque es como soy. No hay ninguna razón en concreto más allá de que me gusta experimentar con los idiomas. En este caso son dos idiomas en los que me puedo mover bastante bien pero me encanta también experimentar con idiomas de los que no tengo ni idea. No sé si es por la sonoridad que aportan o si hay alguna otra razón.
Siempre me ha gustado saber y conocer sobre otras culturas y supongo que este tema va bastante ligado. “Una aguja en un pajar“, de mi EP “Historias Bonitas”, tiene una parte en ucraniano y en un futuro no muy lejano lanzaré otra canción que tiene una parte en japonés.
– Tu último EP, “Historias Bonitas”, habla sobre el amor desde diferentes perspectivas: el amor a los seres queridos, el amor a uno mismo y la búsqueda del amor. Si tuvieras que elegir solo uno de ellos, ¿Cuál consideras que es el más importante?
– Buena pregunta, complicado. Creo que todo empieza por amarse y aceptarse a uno mismo pero en un sentido positivo, sin creerse más que nadie. A partir de ahí todo lo demás creo que viene por sí solo. Creo que sin nuestros seres queridos no somos nadie, al final son la parte de la columna vertebral de nuestra vida y si no están el techo se nos viene abajo.
– Desde 2020 has editado un total de 10 singles. ¿Por qué eres más partidario de ir sacando canción a canción en lugar de editar un álbum completo?
– Vaya, no los había ni contado, ya van unos cuantos. No es que sea más partidario de una cosa o la otra, depende del momento. Por una parte, el proyecto empieza durante el primer confinamiento en el que yo me pongo a componer canciones 24/7 porque no había nada mejor que hacer y acabo con 13 o 14 canciones. Algunas sí tienen cosas en común, algún tipo de relación, pero otras no.
Para mí no tenía mucho sentido juntarlas todas en un álbum porque no había ningún tipo de hilo conductor, ni en estilo, ni en el sonido, ni en los conceptos. Era como un viaje buscando el sonido del proyecto, buscando mi estilo. Eso es algo que a día de hoy creo que estoy empezando a encontrar.
El segundo motivo es que para alguien como yo, que no tengo un gran soporte económico detrás, ni manager, ni discográfica, ni agencia, etc. es mucho más costoso y complicado organizar y costear un álbum, y sentiríamos como que estamos “tirando a la basura” algunos de los temas. Aún así tengo muchísima suerte de contar con un pequeño grupo de personas que me ayudan en algunos aspectos, pero de todas formas la mayoría de la carga de trabajo recae sobre mí: yo escribo y mando las notas de prensa, escribo y produzco la mayor parte del material, edito los videoclips, etc.
Entonces es más eficiente ir pasito a pasito a día de hoy. El momento álbum llegará más pronto que tarde.
– Empezaste tu carrera en los grupos Bostok y Pellikana, ambos de estilos muy diferentes a lo que escuchamos ahora en tu propuesta en solitario. ¿En cuál de todos los géneros te sientes más cómodo?
– Pues no lo sé, la verdad es que desde siempre he sido un culo inquieto y me gusta aprender de otros estilos y culturas. Porque cada estilo tiene sus cosas que te puedes guardar en tu mochila para siempre. Ahora, por ejemplo, estoy estudiando mucha música latina para mi trabajo final de carrera y estoy flipando bastante. Seguro que me voy a llevar cosas interesantes.
Como guitarrista me siento muy cómodo tocando funk porque lo he estado estudiando bastante estos últimos años y es muy natural para mí. Como cantante es más complicado porque me siento muchas veces como en una montaña rusa. A veces me siento capaz de cualquier cosa, de cantar desde Queen, hasta Aerosmith o Stevie Wonder, pasando por Elton John, y a veces siento todo lo contrario, que no doy para mucho.
– Si consideramos cada uno de ellos como una etapa distinta en tu trayectoria. ¿Cómo ha ido evolucionando Manel Espinosa con el paso del tiempo?, ¿Qué sacas de positivo de cada momento?
– Lo cierto es que ahora, mirando hacia atrás, veo que he probado muchísimas cosas diferentes en lo que ha música se refiere. Empecé como percusionista tocando música tradicional en mi pueblo, pasando por el conservatorio y tocando en banda y orquesta y estudiando percusión y guitarra clásica. Luego empecé tocando en varias bandas de música moderna diferentes de las mencionadas, estudié comunicación audiovisual y luego música moderna.
Supongo que el tener tantos inputs me ha llevado a entender la música desde muchas perspectivas diferentes, a adquirir mucho conocimiento y a madurar como persona y como músico. Con Bostok aprendí mucho de la industria musical especialmente con los muchos errores que cometimos y aprendí también a montar un buen directo. De Pellikana me llevo sobre todo haber tenido la oportunidad de hacer giras más extensas, tocar en grandes festivales y haber trabajado con productores como David Rosell y Sam Ferrer.
– Y ya mirando hacia el futuro, ¿Qué otros proyectos tienes a corto/medio/largo plazo?, ¿te has marcado algún objetivo con este nuevo single?
– Como he comentado anteriormente, ando trabajando en mi proyecto final de carrera, que es un álbum. Es un proyecto a medio/largo plazo. Mi intención es volver a España en cuanto acabe para dar el pistoletazo de salida final a mi proyecto y empezar a llevarlo al directo. Quiero mudarme a Madrid y conseguir formar un equipo para seguir avanzando.
Por otra parte, tengo aún material que quiero lanzar a corto plazo, probablemente en forma de single. Respecto al objetivo de “Eres Oro”, obviamente llegar con él a cuanta más gente posible. Pero me conformaría con saber que ha ayudado a alguien a salir de una mala situación. No hay nada que me llene más como artista y como persona que eso.
– Para terminar, ¿hay algo que te quede por decir o qué quieras añadir?
– Simplemente daros las gracias a vosotros por ofrecerme este espacio para expresarme y mostrar mi trabajo. Siento que os habéis preocupado realmente por saber quién soy y de donde vengo. Aprecio muchísimo que os hayáis tomado las molestias y el tiempo.