La profundidad emocional de Dillon Campbell
Aunque no siempre el éxito es hereditario, son muchos los artistas que llevan en las venas el talento familiar. En estos casos lo más complicado es desprenderse de la etiqueta de “ser hijo de” para establecer un camino propio. Jakob Dylan o Elijah Hewson, por ejemplo, han conseguido colocar a sus bandas en lo más alto de las listas de ventas, con un sello de identidad único lejos del estilo de sus padres. Y más sangrante aún es el caso Miley Cyrus, quien ha conseguido eclipsar completamente a su padre, Billy Ray Cyrus.
Ahora es otra saga, los Campbell, la que sigue los mismos pasos. Más allá de ser un icono de la música country, Glen Campbell lo consiguió prácticamente todo en la década de los sesenta. Fue estrella de cine, presentador de televisión… pero sobre todo un músico prolífico con más de 70 álbumes publicados en 50 años de carrera. Y aún hoy, casi seis años después de su fallecimiento, tiene el honor de ser el único artista en haber logrado ganar de forma simultánea el Premio Grammy en dos categorías distintas: pop y country.
Su hijo Dillon toma ahora el relevo. Y lo hace con un estilo diferente, más cercano al rock alternativo. Su carta de presentación, “Save Yourself”, es una pieza efectiva de menos de tres minutos de duración, con un sonido crudo y potente. Los sentimientos más profundos nacen de los altibajos de la vida. Y en este sencillo, Dillan saca a relucir su profundidad emocional, su lírica distintiva y sus melodías sombrías. Con un mensaje bien definido: no importa lo oscuro que se ponga, siempre hay una luz al final del túnel que nunca se apaga.