Loquillo reivindica “La libertad” como modo de vida
Loquillo ha culminado el año por todo lo alto. El artista barcelonés regresaba el pasado mes de noviembre al WiZink Center después de tres años, para celebrar el primer concierto con aforo completo y sin restricciones desde el inicio de la pandemia. Un recinto completamente abarrotado que coreaba al unísono los grandes clásicos del cantante. Éxitos como “Cadillac solitario“, “Feo, fuerte y formal“, “Rock and roll star” o “Los tiempos están cambiando“, junto a los temas de su ultimo disco “El Ultimo Clásico“.
Con la misma frescura que cuando empezó en 1980, Loquillo ha sabido renovarse permaneciendo fiel a sí mismo. En 2007 Josep Simón, último miembro fundador del grupo y propietario legal del nombre, abandonó la banda. Fue entonces cuando Loquillo decidió quitar el apelativo de “los trogloditas” a la formación y empezar a navegar por libre. Pese a ello, la esencia de su música continúa intacta. Igual que su estética: el sombrero de gánster, la chaqueta de cuero y el traje de corte impecable. Unas señas de identidad con las que ha sido la personificación del rock star español durante muchos años.
Y es que, Loquillo es un forajido de lo convencional que ha sabido hacer una carrera sólida a su imagen y semejanza. Trabajador incombustible, disciplinado y tenaz, el de Barcelona ha permanecido más de treinta años en el panorama musical sin dejar de sorprender a nadie. Ni a sus fans a los que ha paseado por gran parte de los estilos, ni a sus detractores que son muchos y feroces. Rompiéndoles los esquemas una y otra vez con sus múltiples facetas, sus cambios de sentido, sus salidas de tono y sus aventuras extra musicales. Fijándose en los grandes y sin perder el norte de su propia personalidad.
Ahora, coincidiendo con la celebración de su 61 cumpleaños, Loquillo ha estrenado “La Libertad“, el segundo adelanto de su próximo álbum. Se trata de una canción compuesta por Sabino Méndez que reivindica la libertad como modo de vida. “Que nadie sea mas que nadie y que el odio siempre queda atrás y que todos puedan cantar sin miedo”, sobre todo en unos momentos tan difíciles como los que estamos viviendo a causa de la pandemia. Una declaración de principios que se apoya sobre el personaje de chuleta sentimental que tan bien ha sabido construir a lo largo de los años.